Si eres padre o madre y trabajas a jornada completa, ya sabes lo que voy a decir. La increíble carga que supone un recién nacido para la familia sólo puede describirse como una bendición abrumadora que requiere que todos se pongan manos a la obra. El camionero Nabil Al-Zoqari, de Laz Parking, pronto será padre de un recién nacido y se está preparando para ese momento programando días libres en el trabajo. Tiempo que tiene derecho a tomarse debido a la (FMLA)Ley de Baja Médica Familiar.
Así que la semana pasada, Nabil y su delegado, Ghebreyesus, se reunieron con el agente comercial James Long y con Laz Parking para asegurarse de que la empresa tenía claro que Nabil quería reclamar parte de su baja por FMLA. Sin el apoyo y la representación sindical, los trabajadores de empresas no sindicadas podrían ni siquiera saber que existe la FMLA o no tendrían confianza para ejercer esta opción. La FMLA permite a los trabajadores ausentarse hasta 12 semanas por motivos médicos, como el parto.
Este es un ejemplo del trabajo diario que los Teamsters hacen por sus miembros. Ayudarte a navegar por los altibajos de la vida, como el nacimiento de un hijo.
Así que únete a nosotros para felicitar a Nabil por su hijo recién nacido y desearle lo mejor en esas primeras semanas críticas en las que ese pequeño bebé necesita estar rodeado de mamá y papá.
Historia de la Ley Federal de Baja Médica
Antes de 1993, los gobiernos y los legisladores no estaban al día sobre la nueva familia nuclear. La madre ya no se queda en casa, ambos progenitores trabajan a jornada completa, y tener un hijo era visto por muchas empresas como un impedimento para su rentabilidad final. Los trabajadores no podían pedir la baja por recién nacidos u otras circunstancias médicas sin enfrentarse a la amenaza de despido.
Sin embargo, en 1993, bajo el liderazgo del presidente Bill Clinton, el Congreso votó y promulgó la Ley de Baja Médica Familiar. Impulsada casi en su totalidad por senadores y congresistas demócratas, esta legislación impedía a las empresas despedir a los empleados que desearan tomarse un permiso por motivos médicos o, en este caso, por un recién nacido, y les otorgaba esta protección durante un máximo de 12 semanas.
Es esta ley la que mantiene a Nabil y a otros camioneros a salvo de la amenaza de despido cuando se enfrentan a un acontecimiento médico que les cambia la vida.